Ingredientes
1 huevo
7 cucharadas de leche
7 cucharadas de azúcar
7 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
300 gr de harina de repostería
Piel de medio limón
1/2 cucharadita de bicarbonato o levadura en polvo
Azúcar y canela molidas para rebozar los rosquillos tras fritos
Aceite de girasol para freirlos
Tostad la piel del limón en el aceite de oliva, retirad la piel de limón y dejad enfriar.
Mezclad todos los ingredientes y poned a calentar el aceite de girasol a fuego medio (no muy alto, porque se quemarían por fuera y se quedarían crudos por dentro).
Con las manos bien impregnadas en aceite (porque la masa es muy pegajosa) coged una cantidad de masa del tamaño de una nuez, hacedles un agujero en el centro y freid los rosquillos.
Escurridlos sobre papel de cocina y pasadlos por una mezcla de azúcar y canela (o mojadlos en almíbar antes de rebozarlos, yo lo voy a probar).
Perfecto para una merienda con sabor a niñez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nos encantaría que nos des tu opinión.